¿Cuál es la base neuroanatómica para seleccionar la región del cuerpo o el punto de acupuntura a trabajar?
Desde el respeto a un sistema médico completo, como lo es la medicina china, valorando y reconociendo su riqueza y complejidad y – por lo mismo – sin querer reducir la práctica a lo que el método científico y sus actuales herramientas nos permiten estudiar, ¡pucha que nos alegramos cuando aparecen nuevos puentes entre los miles de años de experiencia y la evidencia científica actual!
Queremos compartirles un artículo que se acerca a dar respuesta científica a un aspecto de la medicina tradicional china que intriga a terapeutas y consultantes: ¿Por qué los puntos seleccionados para el tratamiento no necesariamente coinciden con el sitio donde siento la molestia?.
Evidencia científica para la práctica de la medicina tradicional china
Nos estamos aproximando a la posibilidad de practicar la medicina china con respaldo científico y claridad biológica, trabajar en base a respuestas medibles. Comprender no sólo cómo actuar sobre la respuesta inflamatoria de las citocinas sino hacerlo en el punto exacto basándose en la distribución de fibras nerviosas, abre un panorama que traería mejores posibilidades de tratamiento para enfermedades crónicas como el Intestino irritable, artritis, tratamiento de los efectos secundarios que la inmunoterapia genera en el tratamiento del cáncer, y todas las reacciones inmunes excesivas, entre ellas, el covid 19.
Disminuir la ingesta de medicamentos, recuperar el bienestar general y una vez más devolverle al organismo la capacidad de autorregularse, son tareas que la medicina china ha desarrollado desde siempre, pero poder hacerlo con certeza y respaldo científico, permitiría que occidente deje de verla como una terapia alternativa para aceptarla como una medicina tradicional. Esto implica entre otras cosas, mayor cobertura de los seguros de salud y por lo mismo, mayor acceso a la población.
Es por esto que nos alegramos, pues contar con el respaldo de ser una práctica basada en la evidencia, que incluye la experiencia profesional, las preferencias del consultante y la mejor evidencia científica disponible, permite ser coherentes con el precepto de “primum non nocere” (primero no hacer daño), minimizando efectos secundarios y conociendo mejor sus posibles contraindicaciones.
Permite también, continuar el diálogo entre distintas miradas de salud, integrar terapéuticas y sistemas de creencias, más que continuar separando en distintas “medicinas”.
La salud es una sola, lo demás, modelos culturales de cómo nos acercamos a ella.
Los invito a revisar este artículo de la revista Medical Press, escrito por Catherine Caruso, Escuela de Medicina de Harvard.
Ma. Ignacia Ramirez
Acupunturista
Instagram @acupuntura.china